2ª Reunión Científica “Medicina basada en la evidencia: evaluación de Tecnologías sanitarias y práctica clínica”

El movimiento de la medicina basada en la evidencia (MBE) fue tratado de forma pionera en España en esta 2ª RC de la AEETS celebrada en Oviedo en 1996. Uno de sus impulsores Andreas Laupacis con nosotros.

La MBE está consiguiendo con su influencia modificar la mayoría de los sistemas de atención sanitaria en todo el mundo. El acceso a las evidencias y su valoración crítica ha llegado a convertirse en el núcleo de la competencia clínica, de forma que las decisiones clínicas y políticas en materia de salud no pueden por más tiempo basarse únicamente en opiniones. La gobernabilidad clínica sin embargo, carece de momento la infraestructura de apoyo a una práctica basada en la evidencia implantada en el grado que sería necesario. La formación continua de los facultativos y el desarrollo de líderes que faciliten su introducción y cambios en la práctica clínica es un objetivo prioritario en la gobernabilidad clínica. 

La mayoría de las decisiones concernientes a un problema relacionado con la salud, se basan en la existencia documentación científica relevante y la experiencia personal del decisor, tanto clínico, gestor o político. La medicina y otras ciencias relacionadas con la salud suelen encontrar en los métodos científicos cualitativos y cuantitativos las respuestas a cuestiones planteadas a muy diferentes niveles. Desde problemas en la práctica médica diaria, hasta decisiones de gestión de recursos, implantación de programas de salud o establecimiento de políticas sanitarias concretas. La correcta decisión que se derive, dependerá en gran medida a la existencia de una documentación científica de calidad, precisando para ello una serie de pasos previos que incluyen una exhaustiva localización de las evidencias disponibles, una lectura crítica de aquellos estudios relevantes y una integración de los resultados que concluyan en una serie de recomendaciones.

El objetivo final que persiguen actualmente la mayoría de los gobiernos en materia sanitaria es la obtención de la mejor práctica clínica (best practice), persiguiendo criterios de calidad y eficiencia. Es por ello que la obtención de información de buena calidad se convierte en una de las prioridades y primer paso necesario para identificar problemas y establecer posteriormente los cambios necesarios, modificación de actitudes y evitar prácticas médicas inadecuadas. El fenómeno de la Medicina Basada en la Evidencia (MBE) adaptada a los diferentes niveles: política, gestión y práctica clínica, se establece como una metodología de trabajo cuyo fin es la integración de la mejor evidencia científica existente con la experiencia personal en la práctica diaria, con los recursos disponibles y con los valores humanos y culturales en la gestión y política sanitaria. La evidencia precisa para ello ser localizada, valorada y evaluada antes de su diseminación e implementación, dado que gran parte de las intervenciones médicas carecen de un beneficio comprobado científicamente.